Guerreras del Amor

Tantas palabras que pugnan por salir,
y sentir los rayos cálidos del sol.
No soy capaz de contenerlas.
Salen en un torrente tan enmarañado
que ordenarlas supone todo un desafío.
Comparto mi parte más íntima,
mis pensamientos más puros,
sin adulterar.
Mis sentimientos inocentes,
sin contaminar.
Y que vértigo hermanas.
Si, hermanas,
porque es para vosotras,
me comparto con vosotras.
Mi declaración de amor tiene destinatarias.
Me arropáis, me aceptáis, me amáis.
Soy afortunada, la claridad, la aceptación,
han llegado en el momento exacto.
Justo un par de minutos antes de conocernos,
sentí el movimiento de la tierra, y ella me gritó,…
“¡¡¡Graciela atenta, que está llegando. Abre los ojos, es ahora. Es la Hora!!!”
Infinidad de errores, tanto de lo que aprender.
Y aquí seguimos caminando juntas.
Luchamos juntas.
Nos hemos vuelto invencibles.
¡Poderosas!
Somos las guerreras del amor.
Quisieron hacernos creer
que eras nuestra debilidad.
Que por tu causa todas
y cada una de nosotras
estamos perdidas.
Amor, estás tan denostado,
has sido ultrajado
por medio de la humillación,
la injuria, y la calumnia.
Nos han dicho que somos
el mal en la tierra.
Que nuestra capacidad para el amor,
“según vuestra historia nuestra única capacidad”,
nos inhabilita para dirigir incluso nuestra propia vida.
Estafa tras estafa,
las hemos perdonado todas
en nombre precisamente del amor.
Han sido cargadas en tu cuenta.
Los números ya no son rojos,
se han vuelto morados, al borde de la anoxia.
Ya no nos podéis engañar,
habéis perdido la ventaja para manipularnos.
Somos libres para amarnos.
No tenemos más dueño
Que nuestro propio placer,
y lo que es nuestro
ya no es asunto vuestro.